sábado, 30 de marzo de 2013

Q u i e r o   q u e r e r t e   h a s t a  volvermeloca.-

viernes, 15 de marzo de 2013

Querido Martín: 

Cuando mañana vengas a buscarme, te explicará mi tía la resolución que he tomado. Es de noche, y en el silencio puedo meditar mejor sobre el terrible suceso de éste día. ¡La he perdido! ¿Te pintaré mi dolor? No podría hacerlo. Recordará que un día, leyendo la vida de Martín Lutero, le juzgué pusilánime porque el terror que le causó la muerte de un amigo a quién hirió un rayo al lado suyo, le hizo entrarse de fraile. Ese juicio era la vana jactancia de la juventud que hablaba por mi boca. Tú, que le absolvías, comprenderás el trastorno de mi espíritu al recibir el golpe que me anonada. ¡Es un rayo del cielo! Me ha venido a herir en mi amor, en medio del corazón, quemando hasta las raíces de la esperanza, el último de los bienes efímeros con que el hombre atraviesa la vida. Sólo una vez al lado del cadáver de mi padre, que expiro en mis brazos, he sentido en el alma un hielo como siento ahora: es la consciencia del abandono en que quedo; de la orfandad eterna de un corazón sin amor, que sólo con amor se sustentaba: ¡ de que nada en el mundo podrá ya consolarme!

Sólo tres líneas , Martín, son las de su carta , pero tres líneas que han corrido como lava ardiente por mi pecho, devastándolo todo, menos mi amor inmenso. En pocas palabras, sin fórmula ninguna que mitigue su aspereza, ella me arroja a la frente su desprecio aterrador. Nada que hable de un pasado de ayer, palpitante todavía, se advierte en esas líneas, nada que haga esperar el perdón que todas las almas nobles, como un destello de Dios , guardan para nuestras miserables flaquezas. Ella, con un corazón de ángel, con el alama bañada de divina pureza, me desprecia Martín, me aborrece. ¿ Cómo luchar contra éste horrorosa convicción? Hasta hoy creía yo que mi voluntad era capaz de hacer frente a todos los contrastes, y era porque no contaba con éste , porque creía que perder la vida, era lo más temible que pudiese amenazarme y contra la muerte me sentía con valor.

Algunas horas he pasado, Martín, reflexionando, como he podido , en lo que debo hacer. Una idea volvía a cada instante a mi espíritu con increíble tenacidad. ¡Es un castigo de Dios! ¿Qué derecho tengo yo , en efecto, de aspirar a la felicidad, cuando he pisoteado sin compasión la de otro ser inocente y débil? Si la justicia del cielo interviene a veces en las faltas del  mundo, debo olvidar la moral acomodaticia con que nos acostumbramos a burlarnos, por torpes pasiones, de lo que hay sobre la tierra de respetable, y postrarme de rodillas ante el fallo justiciero de Dios. El peso de ésta verdad, que casi maquinalmente repiten en las iglesias desde lo alto del púlpito, hiere el espíritu en la desgracias y aterroriza el alma que, en medio de la dicha, las oyera con cuidado fastidio. Cedo, pues , al peso de esta idea: su fuerza me priva de la mía.

Pero no creas , llevado de la impresión de tan tremendo pesar , voy a consagrar mi vida a la penitencia atándome a un claustro con votos indisolubles. Quiero buscar la calma en el silencio, quiero con ejemplos de virtud fortalecerme; quiero ver si es posible borrar su imagen querida de mi pecho; si es posible llorarla como si ella hubiese dejado de existir. Después cuando el tiempo haya tranquilizado mi ánimo y convertido en llevadera melancolía el atroz dolor que me desgarra, ¡quien sabe lo que haré! He vivido tanto en mi amor , que por lo demás , apenas me reconozco; por esto ni aún puedo prever mi resolución.
No creas tampoco que he dejado de pensar en Adelaida. Ni a ella ni a su madre puedo culpar de mi desgracia: las perdono, y ojalá ella lo hagan conmigo. Podría, bien lo se´, reparar a los ojos del mundo mi falta y devolverle su honra que he mancillado; pero, tu no lo ignoras Martín: no la amo. Sería una unión monstruosa que no podría tener otro término que un suicidio, y esto también la haría desgraciada. Conozco que podría darle mi vida, pero no la felicidad. en fin, esto tal vez puede pensarse más despacio. En mi retiro no recibiré a nadie , ¡ ni aún a ti! Te escribiré cuando sienta necesidad de hacerlo, Mi tía queda encargada de recibir mis cartas y mandarme las que me dirijan. Un padres, amigo antiguo de la familia, me ha facilitado este retiro: él será mi consejero.

Tu amigo
RAFAEL SAN LUIS.  




Alberto   Blest Gana.  Martín Rivas. 1862.- 

lunes, 11 de marzo de 2013

Stendhal

Entonces comprendió en ese preciso momento que lo próximo era matar a su padre, pues hacía años había decido que sería un gran escritor.-

miércoles, 27 de febrero de 2013

Cosas que nos hacen cambiar.

Preocupada por el ciber-desastre que tenía en mi cuenta de e-mail , decidí darme un tiempo y tomar la lata de limpiar el correo que tengo hace alrededor de 8 años (¡vaya como pasa el tiempo!). Encendí el Ipod en la mesa de sonido y se me ocurrió que Kimbra podía ser la mejor opción para acompañar la tarde . won´t you settle down with me?...We call her Nebraska. Nebraska Jones (8). Entonces caí en la cuenta de que tenía más de tres mil correos entre no leídos , guardados y en espera, otros que ciertamente jamás voy a leer. Como es típico en estos casos, el vértigo temporal me arrastró varios años atrás y antes de que pudiese si quiera considerarlo había llegado hacia finales del 2010. Mi asombro fue en escala ascendente cuando descubrí varias cosas que ni  recordaba que había escrito o conversaciones eternas de adolescente. ¡¡¡Wow!!! Uno cero contra la retentiva y Platón susurrándome al oído. 
Me saqué los lentes y me restregué los ojos con el dorso de mis manos como es costumbre cada vez que no puedo dejar de pensar en el pasado. Postura de seguridad. Plan de acción. Mejor enciendo la tele, me dije ante la perspectiva de establecer una dialéctica prematura. Enciendo la tele. Cierro el correo. Bostezo. Zapping. Me desespero . Apago la tele y cierro los ojos. Abro los ojos aterrada . miro hacia la pared. Tengo fotografías. Fotografías llenas de recuerdos . Hombres y mujeres. Niños. Valparaíso y escaleras. ¿Qué más veo allí? Veo que no todas ellas son del mismo tamaño.
                  ¿Qué cosa?.-
                  - Las fotografías. Todas ellas , quizá ninguna. 
                   ¿Como son las fotografías?.-
                  - Todas iguales
                   ¿Lo son?.-
                  - no. Pero todas tienen un marco blanco.
                   ¿ lo tienen?.-
                  - Sí , arriba a la derecha y a la izquierda. La chica que sonríe y su sonrisa , tocan el borde , 
                     llegan a blanco, ella está feliz.
                    ¿feliz?.-
                 - Sí lo está mira esas líneas en sus mejillas , solo la felicidad puede hacer eso.
                    ¿Porqué?.-
                 - Van a tomarle una fotografía .-
                    ¿la reconoces?.-
                 - Sí es de aquellas que marca su tiempo , las hace verse diferentes , marca presencia en las 
                   personas veo..
                   ¿ a la mujer la reconoces?.-
                 - su cara me es conocida.
                   ¿ conocida?.-
                 - El grosor de sus labios, el tamaño de sus dientes , ya sabes el tono de sus mejillas cuando 
                    se ríe , no me había dado cuenta de que arruga la frente cuando es feliz , el largo de sus              
                    pestañas , los lunares bajo sus ojos, nunca había visto sólo su sonrisa ¿quién es ?
                  Eres tú.-
                  

viernes, 22 de febrero de 2013

¿ y después nos vamos a la cama?

Tratar de relatar los acontecimientos que nos han mantenidos ocupados ésta semana resulta ser una hazaña realmente novedosa, pienso con una sonrisa mientras escucho cantar I never loved a man (the way i love you) a Aretha Franklin. 
Y es que verdaderamente me faltan palabras con las que expresar lo que hasta hace poco acabo de comprender. Eso es,¡ una semana de largas revelaciones! , me digo a mi misma tratando de encontrarle el gusto a la expresión.
Son la una de la madrugada con seis minutos y como en el resto de los días no puedo dormir, me giro una y otra vez en la cama tratando de encontrarle un lado positivo a la almohada que se hunde como si mi cabeza fuese un bloque firme de plomo atraído hacia el centro de la tierra. Miro el techo y creo refugiarme en el único lugar en que nada parece ser imposible, los libros. 
Con determinación me muevo hacia la pila de volúmenes que tengo apilados en el suelo al lado de mi cama , y ¡ eso es ! para mi sorpresa el génesis de toda la catarsis. Quiero recordar entonces como todo sucedió sucumbiendo ante los recuerdos de años pasados , hasta la pregunta que condenaba mi hasta ese entonces jodida existencia .  
No importa cuantas veces lo escuche , ni como la gente lo plantee. El futuro es una gran rompe-cabezas con piezas por ajustar , una investigación sobre azar , méritos, deseos , ansiedad y sobretodo incertidumbre, ¿es posible ser impasibles ante tanta ambivalencia? 
Aún desconozco la respuesta, solo puedo remitirme a dicotomías pasadas.  Mi madre en primera instancia y mi imagen en segunda. Ahora si culpo con toda justicia hasta los átomos que conforman mis venas " la sangre tira" me rindo entonces. Sí tira y con fuerza. 
La felicidad agotada de mi madre por sus amores inalcanzables, claro está que ella no diría eso, porque ¡vaya que debió haberlo disfrutado! Ahí está su sonrisa nostálgica, la sonrisa de las madres. 
Entonces habla de mi padre , alto , claro y sin ganas. Ya no sonríe , es una tema del que nunca vamos a poder hablar presumo. Sin embargo rompe el silencio explayándose sobre sus motivos y yo sincerándome sobre mis reconres de adolescente herida contra el mundo.
 Tengo ideas vagas sobre una cura para el insomnio. Ella Fitzgerald da igual podría ser Nina Simone o hasta Nelly Furtado cantando Try, esa canción me gusta , pero da igual , a veces todas suenan igual de incomprensibles, igual de femeninas. 
Vuelvo a sentir el peso de mi cabeza sobre la almohada y ésta vez ya no me importa , era todo lo que necesitaba para sucumbir ante una nueva perspectiva . Ante nuevas voces. Ante el futuro . Ante mi misma ¿ que importa? Realmente nada y una sonrisa delineando mis labios . Y yo ante mi asombro. Ante la vida entera de posibilidades. And I have lived so many lives. Though i´m not old. 
Cierro los ojos.